EL HAYEDO LA TEJERA NEGRA
El Otoño es la época
en que los árboles cambian de color, ofreciendo oportunidades inmensas para
disfrutar del uno de los espectáculos más soberbios que la naturaleza nos
ofrece. España tiene varios lugares donde disfrutar de estos espectáculos. En
Castilla-La Mancha tenemos la Serranía de Cuenca, pero más cerca de Torrijos
podemos disfrutar del Valle de Iruelas, con el colorido variado y abundante.
Pero además de los
citados tenemos algo más al norte, en la provincia de Guadalajara, El Hayedo de
Tejera Negra, el hayedo más meridional de Europa, no es tampoco ajeno al
cambio climático. .De hecho, estos ecosistemas que se encuentran en su límite de
distribución, son los más sensibles a cualquier cambio con algunos espacios
llamados rodales que se diferencian de sus vecinos los cuales se encuentran afectados
por la sequía. Al
tratarse del hayedo más meridional de Europa, que precisamente recibe en esta
época del año el mayor número de visitas, es también más
sensible a cualquier cambio. La sequía de los últimos años está afectando a
“algún rodal”, en el que se ha detectado en las hayas algunos síntomas de
decrepitud, y aunque es poco todavía, es significativo”.
Hay que confiar en que se trata de
ciclos y que detrás de uno de sequía venga otro de lluvias, reconociendo que
los hayedos siempre son más sensibles a la falta de agua porque necesitan un
“continuo de humedad”.
Pero al igual de que el cambio climático
influye, también hay que considerar que es una mezcla de muchos factores y que
incluso el espacio que se puede ver afectado va por años.
Tanto desde la Unión Europa como desde algunas
universidades y entidades, se están realizando estudios no sólo sobre el propio
Hayedo y como afecta este cambio sino de su flora, fauna, y otros aspectos de
interés de un espacio que se encuentra dentro de la red de vigilancia de
bosques de Europa.
En cualquiera de sus impresionantes
roquedos podemos apreciar el majestuoso vuelo del águila real, el milano real y azor.También es posible contemplar corzos, zorros, gatos monteses, garduñas, tejones, comadrejas, jabalíes y rapaces nocturnas como cárabo, búho y mochuelo